Sinopsis: Me llamo Linda Conrads. Soy escritora. Mis libros tienen mucho éxito. Tengo treinta y ocho años.
Yo quería a mi hermana. Se llamaba Anna.
¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué tuvo que morir? Esa pregunta me obsesiona.
Ahora he visto a su asesino. Sí, han pasado doce años, pero lo recuerdo muy bien.
La ira me atenaza la garganta y solo puedo pensar en una cosa:
Voy a por ti.
Tras la muerte de Anna, cuyo caso quedó sin resolver, Linda se recluyó en una casa aislada a las orillas de un lago. Para todos, es la misteriosa escritora que rehúye la sociedad. Jamás sale ni concede entrevistas. Pero en el momento en que reconoce al periodista y corresponsal Victor Lenzen en la televisión, empieza a tenderle la trampa. Para saber. Para cazarlo.
Después de leer el argumento supe que tenía que leerla. Es una novela cargada de tensión con pocos personajes y localizaciones. Las buenas críticas que ha recibido en otros países han hecho mella en mi y me lancé a por ella.
Linda Conrads es una escritora que vive con su perro cerca de Munich y lleva sin salir de casa 11 años. Un año antes de recluirse acudió a visitar a su hermana y se la encontró en un charco de sangre y por breves segundo pudo ver el rostro de su asesino.
Ahora, viendo la tele se topa con ese rostro que la ha perseguido durante muchos años, pero ¿cómo puede enfrentarse a él si no puede salir de casa? Se le ocurre que podría escribir una novela negra con todos los detalles de la muerte de su hermana y concederle en exclusiva una entrevista dentro de casa. ¿Acudirá a ella?
A lo largo de la novela los capítulos ambientados en la realidad se irán intercalando con otros en los que veremos partes del libro que ha escrito Linda con todos los detalles del asesinato de su hermana.
El libro en sí tiene una alta carga de suspense psicológico pero por mitad alcanza el clímax y luego para mi pierde todo el fuelle y trata sobre los traumas y la fortaleza psicológica. La complejidad psicológica que ha dotado la autora al personaje de Linda es impresionante, ha sabido plasmar en ella todos los miedos, la culpa y el rencor que nacieron a consecuencia de la muerte de su hermana.
Linda Conrads es una escritora que vive con su perro cerca de Munich y lleva sin salir de casa 11 años. Un año antes de recluirse acudió a visitar a su hermana y se la encontró en un charco de sangre y por breves segundo pudo ver el rostro de su asesino.
Ahora, viendo la tele se topa con ese rostro que la ha perseguido durante muchos años, pero ¿cómo puede enfrentarse a él si no puede salir de casa? Se le ocurre que podría escribir una novela negra con todos los detalles de la muerte de su hermana y concederle en exclusiva una entrevista dentro de casa. ¿Acudirá a ella?
A lo largo de la novela los capítulos ambientados en la realidad se irán intercalando con otros en los que veremos partes del libro que ha escrito Linda con todos los detalles del asesinato de su hermana.
El libro en sí tiene una alta carga de suspense psicológico pero por mitad alcanza el clímax y luego para mi pierde todo el fuelle y trata sobre los traumas y la fortaleza psicológica. La complejidad psicológica que ha dotado la autora al personaje de Linda es impresionante, ha sabido plasmar en ella todos los miedos, la culpa y el rencor que nacieron a consecuencia de la muerte de su hermana.
Me ha dado mucha pena que con todo lo que se podía haber hecho con este planteamiento, al final la autora no supiera tejer una historia que mantuviera un ritmo constante durante toda la novela. Mi problema ha sido que esperaba un thriller y al toparme con una novela tan dramática y con pocas dosis de suspense me ha defraudado un poco. Pero si ya váis sabiendo qué os podéis encontrar, creo que sacaréis mucho más jugo del que he sacado yo.
Puntuación: 5/10. Como me ha gustado solo hasta la mitad le pongo un aprobado raspado.
Precio: 17.90 € y 352 páginas. Grijalbo.
Felices Lecturas.